Piñera, ¿El nuevo Bush del mundo?

No podemos dejar pasar este bochorno comunicacional, no porque este ligada directamente con nuestra temática bloggistica, sino porque hace mención al error humano pero no menos justificable de un medio de comunicación.
Sabemos que para llegar a publicar una noticia, entrevista, o un reportaje de investigación, se debe pasar por un sin número de personas que te destruyen, ayudan o cambian el proyecto ya hecho como, periodista, editor periodístico, compaginador, mediamanager, y hasta el editor general. Pero si se sabe de este protocolo necesario, para no cometer errores como los que estamos viendo, ¿cómo puede salir al aire este error garrafal? “PIÑERA PRESIDENTE DE LOS ESTADOS UNIDOS”.
Me abstengo de mi condición emocional hacia el canal que me dio la oportunidad de realizar mi práctica, y por primera vez, tomo un rol de analista y me embeleso con hechos tan erróneo como el publicado hace unos días atrás por el medio de comunicación, Canal13. Se sabe que esta empresa, sufre múltiples crisis, tanto económicas como comunicacionales, y que estas faltas hunden aún más la imagen del canal del angelito, pero se sabe que el 13 es uno de los canales más profesionales en el ámbito de contingencia periodística y entretención, entonces ¿por qué el público los enjuicia radicalmente con el tan temido rating?.
Hoy, los noticieros centrales sacan los más bajos puntos en sintonía (15 a 10 puntos), y ocupan el último lugar en los puestos de noticias (cuarto o quinto), docu-realitys, y ahora último en los tan retocados realitys, donde en el año 2003 fueron los reyes en este género con el programa “Protagonistas de la Fama. ¿Cuál será la causa de esta crisis?, ¿Saldrán de esta fosa?, ¿Por qué no pueden repuntar?, ¿Hay mal manejo interno?. Cientos de trabajadores, periodistas, y profesionales de las comunicaciones se han preguntado esto una y otra vez, pero lo que sí esta claro, que la cercanía con la gente es cero. Esto sucederá, ¿Por qué canal 13 sigue siendo mirado como el medio de la clase alta?. Este es un prejuicio, pero del que hoy pesa entre las planas altas y bajas del canal naranja.